Llena tus espacios de personalidad
La sala es uno de esos lugares hechos para brindarnos comodidad. Reúne a la familia, nos ofrece ratos interminables de descanso y nos recibe cuando solo queremos olvidarnos del mundo y concentrarnos en ver una película. Por ello, es importante darle atención a los pequeños detalles que la convierten en nuestro lugar favorito. La decoración para salas es una especie de arte, pero esto no quiere decir que sea difícil alcanzar la máxima calidad en la forma en que la embellecemos. ¡Al contrario! Puede ser más que divertido.
Estilo simplista: ligera y cómoda
Para crear un espacio hogareño y acogedor, no es necesario saturar nuestra sala de elementos decorativos que carecen de funciones reales. Los espacios abiertos, las combinaciones de colores claros y la ausencia de jarrones, repisas y mesillas demasiado grandes, puede ser la clave para que tu sala luzca moderna y ordenada. Además, usar el mobiliario necesario sin excedernos en los otros elementos, te permitirá limpiar con mayor facilidad.
La iluminación importa
Un tip básico de decoración de salas, es tomar en cuenta las entradas de luz de la estancia. Esto te permitirá realizar una buena selección de colores para combinar tanto en las paredes como entre los objetos situados alrededor. Un momento perfecto para visualizar la distribución de los elementos es, irónicamente, durante la noche. Los espacios suelen cerrarse al no contar con una gran fuente de luz como la del día, por lo que podrás ubicar mejor las lámparas, los muebles y algún otro mobiliario que busque complementar tu sala.
El minimalismo puede ser la clave
Como ya hemos mencionado, la ausencia de objetos decorativos innecesario ofrece grandes ventajas a quienes buscan un estilo moderno y acogedor para su sala. Por lo tanto, es importante enfocarnos en lo necesario, lo simple y lo cómodo. Nuestra sala puede convertirse en un nido de muebles si no descartamos aquello que sentimos irrelevante. El minimalismo es una excelente alternativa para espacios pequeños que buscan verse grande. Elige colores claros y pocos elementos y obtendrás como resultado una sala de la que no querrás salir.
Y hablando del color…
No todos los colores funcionarán, por lo que debes jugar con diferentes combinaciones hasta dar con el resultado ideal. Las tonalidades claras sirven para ampliar los espacios, mientras que las oscuras buscan neutralizar esa amplitud. Para salas pequeñas lo mejor siempre serán los tonos claros combinados, tal vez, con algún color que sirva para destacar una zona específica. Dependerá de tus preferencias, las dimensiones del ambiente y el color de mobiliario que hayas elegido.
La decoración para salas puede ser una actividad que disfrutes al máximo y con la que puedas obtener resultados impresionantes. Anímate a jugar con colores y texturas y obtén el espacio perfecto para pasar el rato a gusto.